En tanto la respuesta por parte de ABSA se hace esperar, «hay vecinos con problemas renales», afirmó Carolina Ferreyra, una de las vecinas que convocó a una reunión para discutir sobre la problemática «a la que no asistieron ni ABSA ni el municipio».
Según expresó Carolina «la única respuesta que nos dio ABSA fue que hay que hacer obras por 84 millones de pesos», pero «no dijeron más nada que eso».
En tanto, los vecinos recurren diariamente a la delegación municipal, porque el agua de toda la zona «no es potable», según determinaron estudios y la Justicia. En este contexto, afirman los vecinos, es que se comenzaron a detectar patologías de posible vínculo con el agua salinizada. Este sería el caso de Carlos, quien padece de una repentina dermatitis, y el de su mujer, quien tenía presión baja y ahora es hiperensa.
Carolina Ferreyra fue entrevistada en Contacto Universitario de AM 1390
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Fotos: La reunión de vecinos a la que no asistió ninguna autoridad y la carta de invitación